La Tribuna de Ávila se hace eco de la noticia que ha recorrido la provincia de León.
A nadie sorprenderá en León que Dani Giganto esté nominado en una de las 21 categorías de los XXV Premios Verema. Daniel Giganto (León, 1981) ha mamado la hostelería desde que nació. Hijo del veterano cocinero leonés Amancio, a los 16 años ya tenía claro que el servicio de sala y el mundo del vino eran su gran pasión. En 2008 fue parte del equipo de sumilleres de El Bulli y en 2018 se sumó al equipo de bartenders de Diverxo, por citar sólo algunos de los hitos de su trayectoria.
De vuelta a casa, con el patriarca ya jubilado, Giganto se incorporó al grupo hostelero Vamuca: formó parte de aquel gran proyecto truncado que fue el LAV, un restaurante muy especial de León que desapareció tras la pandemia sin lograr los reconocimientos para los que su equipo trabajó sin descanso.
Giganto pasó luego a otro de los locales del grupo, el Marcela, donde ha desempeñado su trabajo al frente de la sala y como responsable de la carta de vinos hasta que hace apenas un año fichó por el restaurante Muna de Ponferrada, donde ahora ejerce como director de sala y sumiller de uno de los dos locales del chef Samuel Naveira. Allí han recibido juntos esta semana la nominación de Giganto a los premios Verema: «Me encanta mi oficio y cada día tengo más claro que esto va de personas«, señalaba este viernes a Tribuna León, ilusionado. Hace apenas unos meses, Giganto figuró en el puesto 4 del ‘top 100’ de sumilleres.
